Antibióticos naturales

¿Qué son los antibióticos naturales?

Como sabemos hoy en día, los antibióticos naturales son una mejor opción que los convencionales. ¿Por qué? ¿Por qué? En primer lugar, casi no hay efectos indeseables, sino también la ausencia de absorción de productos químicos que a veces son cuestionables.
Además, muchos patógenos han evolucionado y ahora son resistentes a los antibióticos debido a las grandes dosis de antibióticos administrados. Además, el uso excesivo de antibióticos no sólo puede agravar una enfermedad, sino también hacerla más resistente a los medicamentos.
Altamente lucrativo en el lado de los laboratorios farmacéuticos, los antibióticos han sido controvertidos desde hace varios años, porque muchas personas se dan cuenta de que los antibióticos se prescriben con demasiada frecuencia, y a veces incluso erróneamente, lo que puede tener consecuencias muy graves en nuestro sistema inmunológico.
Otro problema con los antibióticos químicos es que, además de ingerirlos masivamente para “curarnos” a nosotros mismos, también los ingerimos en grandes cantidades cuando consumimos productos animales como carne, leche, queso, etc., por lo que es tan importante consumirlos.
De hecho, algunos animales son tratados de forma preventiva y curativa con dosis masivas de antibióticos, que se encuentran inevitablemente en nuestro organismo al final de la cadena…
Es esencial darse cuenta de la importancia de cambiar las actitudes hacia los antibióticos, especialmente porque hay antibióticos naturales que no todos tienen estas desventajas y también son muy eficaces.
He aquí algunos ejemplos:

Ajo

El ajo se ha utilizado en todo el mundo durante miles de años con fines medicinales. Este alimento milagroso trata casi todo, desde simples dolores hasta neumonía, gripe y otras infecciones.
Las investigaciones actuales han confirmado que el ajo tiene muchos antioxidantes que matan las bacterias y eliminan los radicales libres del torrente sanguíneo, lo que también protege el sistema inmunológico y lo hace más eficaz.
El ingrediente activo del ajo, la alicina también puede atacar y destruir muchos virus, a diferencia de los antibióticos modernos, así como las infecciones por levaduras como la candida.
La ingesta de ajo se puede hacer de forma muy natural por alimentación, o bien mediante la ingesta de suplementos concentrados que actúan de forma aún más eficaz, y sin los inconvenientes para respirar que el consumo de ajo fresco puede tener.

Equinácea

La equinácea es uno de los remedios herbales más populares para los resfriados, la gripe y otras infecciones bacterianas.
Ha sido utilizado por herbolarios como purificador de sangre, así como para tratar un número de infecciones. La equinácea actúa como un antibiótico natural estimulando el sistema inmunológico y aumentando los glóbulos blancos en la sangre. Debe tomarse sólo en caso de enfermedad porque el cuerpo puede acostumbrarse a sus efectos si se toma a largo plazo.
Definitivamente una planta para tener siempre en su botiquín.

El pau d’ arco

Pau d’ Arco es una planta nativa de Sudamérica cuyo ingrediente activo, el lapacho, ha sido recientemente estudiado y promovido por su capacidad para aliviar una amplia gama de infecciones. Estas infecciones incluyen infecciones bacterianas, virales y micóticas, lo que las convierte en un antibiótico natural de alto rendimiento. Los estudios sugieren que el Pau d’ arco también puede tener propiedades anticancerígenas, aunque se necesita investigación adicional. El Pau d’ Arco ha sido utilizado desde hace mucho tiempo por los indios sudamericanos para fortalecer su sistema inmunológico y luchar contra las enfermedades. Lo mejor es consumirlo como infusión o decocción.

Hidracita

Hydraste es otra planta que a menudo se encuentra en las formulaciones de antibióticos herbales. Tiene propiedades antibacterianas y antimicóticas. Hydraste a menudo es utilizado por herbolarios para tratar infecciones de los senos paranasales, infecciones vaginales, infecciones del oído y dolor de garganta. Puede tomarse internamente o usarse como gárgaras para la garganta o como solución de lavado vaginal.
Tenga cuidado con las mujeres embarazadas, que no deben tomar hidratación durante el embarazo, ya que puede estimular las contracciones uterinas. Hydraste también reduce los niveles de azúcar en la sangre y no debe ser tomado por personas con diabetes.

La col y el brócoli

Un miembro de la familia de las crucíferas, junto con el brócoli, col rizada, coliflor y coles de Bruselas, el repollo es conocido desde hace mucho tiempo por sus poderes curativos. Es muy rico en vitamina C y se considera un antibiótico natural por sus efectos. El jugo de col es altamente recomendado en el tratamiento de las úlceras estomacales.
Además, el repollo también puede calmar la inflamación cuando se usa externamente.

Mirra

La mirra ha sido usada por los herbolarios durante siglos y su uso se menciona incluso en la Biblia. Es un antiséptico, antibiótico y antiviral natural de alta eficacia que puede ser tomado internamente, como gárgaras o aplicado a heridas. La mirra se recomienda especialmente para la bronquitis, úlceras bucales y dolores de garganta. La mirra se considera un poderoso antibiótico natural que puede aumentar la producción de glóbulos blancos en el torrente sanguíneo para tratar enfermedades. Sin embargo, se recomienda que no use la mirra durante más de dos semanas seguidas, ya que esto puede implicar demasiado trabajo en los riñones.

Orégano

El orégano es una planta perenne que crece en climas cálidos y secos, principalmente alrededor del Mediterráneo.
Habitualmente utilizado para condimentar platos de la cocina italiana, el orégano también tiene notables cualidades antisépticas. Por lo tanto, el orégano se ha utilizado durante mucho tiempo para tratar infecciones estomacales y respiratorias, así como para aliviar el dolor y el dolor de garganta. El orégano también tiene propiedades antioxidantes y antimicrobianas por su alto contenido en ácidos fenólicos y flavonoides, lo que lo convierte en un antibiótico natural muy eficaz.

Aceite de neem

El aceite de neem es un aceite vegetal hecho de frutas y semillas de neem, un árbol con hojas perennifolias que se encuentra en el subcontinente indio.
Sin embargo, el aceite de neem, compuesto principalmente de triglicéridos, no se utiliza para fines culinarios; se utiliza principalmente en la fabricación de cosméticos, jabones y medicamentos.
El aceite de neem se ha utilizado para tratar enfermedades como el acné, la lepra, la malaria, la tuberculosis, el tétanos, el eccema y muchas otras enfermedades, tanto menores como graves. Con un fuerte componente antibiótico, el aceite de Neem también se utiliza en pesticidas naturales.

Extracto de semilla de pomelo

El extracto de pepita de pomelo es un líquido derivado como su nombre sugiere de las semillas de pomelo, pero también de las membranas blancas del fruto.
Algunos herbolarios consideran que el extracto de semilla de pomelo es un agente antimicrobiano, antiviral y antimicótico y por lo tanto eficaz en el tratamiento de enfermedades como la candidiasis, enfermedades infecciosas, dolores de garganta, úlceras gástricas y diarrea. El extracto de semilla de toronja también se ha utilizado para tratar problemas dentales como la gingivitis. Un estudio sugirió que el extracto de semilla de pomelo desempeña el papel de un antibiótico y podría, entre otras cosas, ayudar a prevenir el desarrollo de ciertos cánceres, incluyendo el cáncer de colon.

Ver también: graviola, cebolla, comino, infección, infección urinaria, infección del tracto urinario, infección dental, sinusitis, angina de pecho, conjuntivitis, miel, té verde.